Inspirada en los poemas clásicos de las mujeres árabes, Medieval Femme invoca un ensueño a través de la metáfora de un jardín islámico, en la frontera entre la depresión y el deseo, donde el presente se disuelve temporalmente, dejando solo pasado y futuro.
Mezclando drones y los tenues contornos de la melodía Arabesque, Medieval Femme revela un entorno de ensueño completamente realizado, sombreado con color y una fricción sutil. Transmitiendo un estado temático de anhelo melancólico, Fátima busca transportar al oyente a un lugar de ensueño y desolación, para regocijarse en el dolor celestial.
Medieval Femme toma la instrumentación de la música de la Edad Media, refundida en un entorno futurista; Laúdes, órganos y tubos de sintetizador suave reverberan en el espacio mientras pulsos vaporosos se ondulan en respuesta. Las voces de Fátima de frases repetidas como mantras a veces se modifican y se modifican, provocando picos cada vez más intensos, coros angelicales y encantamientos anhelantes.